• Uso permanente de mascarilla o EPI. En los bares, restaurantes y demás establecimientos de restauración, las personas se lo quitan para comer o beber, lo que aumenta el riesgo. En nuestras instalaciones las personas lo llevan durante toda su visita.
• Más movimiento y menor tiempo de exposición. En nuestras instalaciones el dinamismo de los visitantes es constante ya que no están sentados a corta distancia y circulan de manera regular por todo el recinto. En los bares o restaurantes, sin embargo, el tiempo de exposición es más prolongado.
• Espacios mayores y menor cantidad de personas. Los protocolos internacionales para los Centros de Entretenimiento Familiar exigen un aforo de una persona por cada 4 metros cuadrados mientras que en un bar se limita la capacidad al 50% del aforo con unas 18 personas en 55 metros cuadrados. Esto se traduce en que hay una persona por cada 3 metros cuadrados. Como se puede deducir, en el caso de las instalaciones de Sould Park la concentración de personas será menor, lo que reduce más aún el número de posibles contagios.